SU INFIERNO PARTICULAR: LA BÁSCULA

jueves, 30 de marzo de 2006

El espejo era su peor enemigo. Ni siquiera se atrevía a mirar de reojo el reflejo que le ofrecían esos escaparates que lucían tallas tan minúsculas rebajadas. No estaba segura de cuál era el peso que quería lograr. Cuando estuviera en el, lo sabría.

Empezó imponiéndose una rigurosa dieta y obligándose a si misma a correr todas las mañanas. La dieta dejó paso a un odio extremo a todas las comidas. Terminó alimentándose con sólo uno o dos vasos de agua diarios. El deporte, tuvo que dejarlo de lado, porque su débil cuerpo ya no la respondía como antes.

Su infierno particular era la báscula. Adelgazaba kilos y kilos, pero continuaba viéndose gorda...jamás podría zafarse de aquellas enormes masas de grasa.Se pasaba horas y horas frente al televisor, envidiando y elevando a la categoría de diosas a todas aquellas modelos publicitarias que lucían su extrema delgadez sin pudor alguno...Su estupendo cuerpo.

No tardó mucho en notar que sus uñas se reblandecían. Su pelo comenzo a caerse, e incluso, perdió la menstruación. No la importaba...tenía que perder más peso.

Cuando su peso no llegaba a los 40 kilos, fue ingresada en un hospital. Su colaboración con el tratamiento era nula. Ella no estaba enferma...sólo estaba un poco gorda. Lucía había entrado en una espiral de la que no sabía salir.

Estuvo a punto de morir dos veces. Una por inanición. La segunda por propia voluntad, al darse cuenta de que el peso ideal que intentaba conseguir no existía. Ambas veces burló a la muerte, pero hoy, cuatro años después, aún no ha conseguido dejar del todo a un lado las recaídas. Lucía tiene suerte. El suyo es un caso ficticio, pero el de muchas otras personas, no lo es.

***

Indignante...me parece indignante. No veo mucho la tele...para qué os voy a engañar, pero cada vez la veo, aparece ante mis ojos algo que me indigna. Ayer fue un anuncio...No diré la marca del producto que anunciaban porque, para ser sincera, ni siquiera me acuerdo. La frase que escuché, el slogán con el que se publicita esta marca, no me permitió escuchar más.

El tema está en que anuncian una especie de "barrita energética", usando a una niña muy mona y con unos cuantos kilos menos de los que debería lucir la nena. Y, atención a la super frase, según el anuncio esta barrita es perfecta para "saltarse una comida". ¿...?????

Indignante...

Pero a ver ¿cómo permiten que salga en pantalla un anuncio como ese? ¿Cómo puede ser que aconsejen saltarse una comida sustituyéndola por una barrita? ¡Por una minúscula barrita!Ay, madre...y luego nos quejamos de las anorexias, las bulimias y demás desarreglos alimenticios.

Imaginémonos a una niña de 15 años, una niña que sueña con ser como las super modelos de la talla 34 ó 36 de la pasarela cibeles. Imaginémonos que esa niña ve el anuncio...

No nos imaginemos más, que me da pánico pensar en lo que le pueda pasar...Quizás, la báscula llegue a convertirse en su infierno particular.

8 sueños:

Anónimo dijo...

Bueno con tu artículo!!!Yo tengo que decir unas cuántas cosas sobre él. Primero, que llevas toda la razón del mundo y que me alegro que no sea tu caso el que has puesto como ejemplo.
Segundo¿te has pasado por el blog de princesitabonita? Se llama así. Buscaló en mi blog, tengo algunos comentarios suyos e intenta meterte en su pagina y verás a la persona que acabas de describir.
Y tercero, yo estoy comiendo esas barritas que tú dices, pero con precaución, sabiendo lo que hago, no soy una niña, y me ván muy bien. Por lo tanto, no todo el mundo comete tonterías de ese tipo, ni tampoco se puede generalizar. Porque hay de todo.

Un besazo,guapa.

Martha dijo...

Bufff...acabo de entrar en el blog que me dices. No sé que decir...he pensado en dejar un comentario pero no se muy bien como hacerlo. Ya pensaré algo!
Ah! Claro que no estaba generalizando...comer esas "barritas" con responsabilidad no debe ser malo, pero que el anuncio diga que te puedes saltar comidas con ellas....mmmm, no sé, me da que con 15 años lo puedes interpretar de una manera muy errónea, no?
Besitos guapa!

Anónimo dijo...

Es que las que yo tomo, no son esas en concreto, son sustitutivas de comida. O sea que llevan todas las vitaminas necesarias y todo eso. Y solo lo hago a mediodía. El resto del día me controlo. Y sí deverías dejarle un mensaje o remitirla a tu página para que viera tu artículo que está muy bien.
Besos guapa.

Anónimo dijo...

es horrible la presión que ejercen los medios...
Sinceramente, yo también estoy un poco obsesionada con mi peso y lo paso fatal. Besos.

pd: gracias por dejar un comentario!

Azusa dijo...

Upss, lo veo un tema difícil, pero me parece injusto echarle la culpa a los medios, a la publicidad, al cine...
Tb aparece siempre gente con sonrisas perfectas y no por eso va todo el mundo de cabeza al dentista.
En realidad lo que quiero decir es que el problema reside en muchas partes, tu propia personalidad, lo que ves, cómo te afecta eso que ves, los comentarios de la gente, etc, etc...Es algo demasiado general como para achacarle la culpa sólo a un factor.

Azusa dijo...

Uhm, por cierto, también te añadí un link en mi blog

Anónimo dijo...

Como has podido ver en mi blog yo también estoy haciendo dieta, estricta, y la hago porque quiero y porque me siento bien haciéndola porque me hace falta, pero siempre controlada por un médico, que es así como se hacen las dietas, que una misma NO se puede.

Saludos

Anónimo dijo...

Sí que es indignante... pero es así. La sociedad de hoy está concienciada para adorar y mitificar a esas tallas 36, sobre todo los chicos. Y eso a las chicas nos produce un "algo" en el subconsciente que nos empuja a perder peso, y perder... y no hallamos el límite porque ellos siguen sin mirarnos: primero porque nos sobran y luego porque nos faltan... Aquí una más que está cayendo, pero sin extremos. Dieta controlada, sip, pero excesos... ninguno.

María

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